En los papeles previos, se espera que el juicio comience cerca de las 11:30 de la mañana. Cristina Kirchner arribaría a Comodoro Py unos diez minutos antes. Se aguarda que lo haga en un coche particular, cortejada por otros vehículos, tal como sucedió en sus visitas anteriores a los Tribunales.
El juicio se realizará en la sala AMIA, la más grande del edificio judicial y que está en su subsuelo y en la que Cristina Kirchner ya estuvo: declaró como testigo en los juicios por el atentado a la AMIA y en diciembre de 2016 por las irregularidades en esa investigación.
Alberto Fernández, quien hace unos días fue anunciado como el compañero de fórmula de Cristina Kirchner y precandidato presidencial, no podría ingresar al recinto como «espectador», ya que en su momento tendrá que declarar como testigo.
Así y todo, a primera hora de la mañana ya se hicieron presentes, entre otros, la diputada nacional Gabriela Cerruti y el ex secretario general de la Presidencia durante el kirchnerismo, Oscar Parrilli. De hecho, la legisladora publicó una foto en las redes sociales en la que posa junto a compañeros de su espacio dentro del edificio de Comodoro Py: en la imagen se puede ver a Mayra Mendoza, Martín Sabbatella, Mónica Macha, Gabriela Estévez y Cristina Álvarez Rodríguez, entre otros. También ya acudió a los Tribunales el diputado nacional Rodolfo Tailhade y el ex ministro de Trabajo y actual legislador porteño Carlos Tomada.
Con el correr de la mañana se hicieron presentes el ex presidente del CONICET y actual diputado nacional, Roberto Salvarezza, y el Secretario General de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), Hugo Yasky. También se hicieron presentes la diputada nacional por el Frente para la Victoria Luana Volnovich y quien fuera gobernador de Entre Ríos durante los dos mandatos de Cristina Kirchner, Sergio Urribarri.
Poco después de las 10.30 de la mañana, arribó a Comodoro Py la líder de las madres de Plaza de Mayo y quien cumplió un rol protagónico en la escena política durante los 12 años de kirchnerismo, Hebe de Bonafini.
La ex presidenta está acusada de ser jefa de una asociación ilícita y de administración fraudulenta en perjuicio de una administración pública. Si es encontrada culpable podría ser condenada a una pena de entre cinco y 16 años de prisión. En cualquier escala, la condena es de cumplimiento efectivo en una prisión pero para que eso se cumpla el veredicto debe ser ratificado por la Cámara Federal de Casación Penal.
Los acusados son 13. Además de Cristina Kirchner y Lázaro Báez se sentarán en el banquillo Julio De Vido, ex ministro de Planificación Federal; José López, ex secretario de Obras Públicas; Abel Fatala, subsecretario de Obras Públicas; Carlos Kirchner, ex titular de la Subsecretaría de Coordinación de Obra Pública Federal y primo del ex presidente Néstor Kirchner; Nelson Periotti, ex titular de la Dirección Nacional de Vialidad; Raúl Daruich y Mauricio Collareda, ex jefes del distrito Santa Cruz de la Dirección Nacional de Vialidad; y Héctor Garro, Juan Carlos Villafañe, Raúl Pavesi y José Santibañez, todos ex presidentes de la Administración General de Vialidad de Santa Cruz.
El edificio de Tribunales estará completamente vallado. La seguridad definió que la ex mandataria ingrese por la calle Costa Brava, mediante una puerta trasera de Comodoro Py por la que siempre llegó cada vez que fue a tribunales. Ingresará por una puerta lateral que queda a poco más de 20 metros de la sala de audiencia. Se dispuso que, en caso de que en el juicio se haga un cuarto intermedio, la ex presidente disponga de una sala y un baño para que espere allí el reinicio de la audiencia.
La Policía Federal Argentina presentará nada menos que entre 120 y 130 efectivos que estarán distribuidos tanto fuera como dentro de Comodoro Py.
Además, las fuerzas policiales estarán acompañadas por personal de la Gendarmería Nacional, de la Prefectura Naval Argentina y de la Policía de la Ciudad. Todos estos actores actuarán en las calles aledañas a los Tribunales.
Se espera que el juicio dure un año. Las audiencias se realizarán todos los lunes y se espera que en un futuro también se sumen los martes. El calendario fue diseñado como para que la fase de alegatos y el veredicto se dicten una vez que hayan pasado las elecciones presidenciales. Durante las fechas de los comicios, se desarrollará la fase de declaraciones de los 159 testigos.