Hoy martes empezará a tomarse la prueba Aprender en todas las secundarias del país. Los 473 mil estudiantes del último año (quinto o sexto según la provincia) rendirán lengua y matemática. A su vez, mañana una muestra representativa de 21.600 alumnos responderán sobre ciencias naturales y educación ciudadana.
Además de los chicos, en total habrá 35.450 agentes del sistema educativo involucrados en la evaluación, entre coordinadores, directores, veedores, docentes y observadores federales.
Es el cuarto año consecutivo que se toma la prueba Aprender, que vino a reemplazar al Operativo Nacional de Evaluación (ONE), que se aplicaba durante el kirchnerismo.
Pese a que las 11.400 escuelas secundarias del país deben tomar la prueba, en ninguna de ellas se suspenderán las actividades académicas. Según indican desde la cartera educativa, habrá clases con normalidad.
Cuando diseñaron la prueba Aprender, se evaluaba al mismo tiempo al sexto grado de primaria y al último año de secundaria. A partir del año pasado, decidieron reducir la frecuencia de la prueba y comenzaron a alternar. En 2018 le tocó solo a la primaria; en 2019 es el turno de la secundaria.
Desde 2016, por resistencia sindical, la gran barrera con la que se toparon fue el bajo nivel de participación, sobre todo en la gestión estatal. En 2017 solo respondió el 71% de los alumnos de escuelas públicas; muy poco si se considera que se trata de una evaluación censal. En 2018, no obstante, la participación mejoró: respondió el 88% del total de los estudiantes.
«Creemos que la participación este año va a aumentar. Es la primera vez que no hay un paro convocado por CTERA o por sindicatos provinciales. La cultura de la evaluación se ha instalado como una cuestión fundamental. Los directores, estén o no afiliados, se dieron en cuenta de que es muy útil la información que le proporcionamos en los reportes por escuela», le dijo a Infobae Alejandro Finocchiaro, ministro de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología.
Hoy martes se tomará lengua y matemática. En lengua, en los últimos años, se registró una mejora ostensible en los aprendizajes. En esta ocasión, se los evaluará en comprensión lectora con textos literarios y no literarios, como cuentos breves y escritos de divulgación científica, para indagar en tres capacidades: interpretación, extracción y reflexión.
En matemática, donde persiste un profundo estancamiento -e incluso leve desmejoría-, se hará foco en la resolución de problemas, en áreas vinculadas al número y sus propiedades, funciones, ecuaciones e inecuaciones, geometría y medida, y estadística y probabilidad. En 2017, el último año que se evaluó matemática en secundaria, siete de cada diez chicos desaprobaron.
Mañana en 300 escuelas, elegidas representativamente del total nacional, los chicos rendirán ciencias naturales y educación ciudadana. En naturales indagarán en temáticas como seres vivos, la materia, la energía y el medio ambiente. Según explican, los ejercicios se presentarán a través de situaciones de la vida cotidiana, del entorno natural o el contexto de una investigación científica.
La principal novedad es que, por primera vez, se evaluará también en cívica. Se les pedirá a los alumnos que reconozcan hechos, datos y conceptos vinculados a la ciudadanía. Los contenidos girarán en torno a la Constitución Nacional, la forma de gobierno, democracia y dictadura, autoridades nacionales, derechos y garantías, derechos humanos, el sistema electoral argentino, identidad, violencia, igualdad de género y discriminación y educación vial. El operativo costará 345 millones de pesos.
«Todos los años evaluamos en lengua y matemática porque son las dos materias troncales. En estos años también evaluamos en ciencias naturales y sociales, hicimos un cuestionario sobre educación sexual integral el año pasado. Creíamos que era una buena oportunidad de incluir educación ciudadana. Queremos saber qué saben los chicos. Tener información concreta para poder tomar decisiones y, de ser necesario, tratar cambios curriculares en el Consejo Federal», planteó Finocchiaro.
Antes de fin de mes, entre el 24 y el 25 de septiembre, una muestra de alumnos de tercer y sexto grado responderán la prueba internacional ERCE de la Unesco, que compara los sistemas educativos de la región. A ellos se los evaluará en escritura, lectura, matemática y ciencias naturales. Además, Formosa, Misiones y La Rioja harán una autoevaluación en sus institutos de formación docente; un proceso que ya llevaron adelante 17 provincias a principios de año.