En una ráfaga de fútbol ofensivo el Millonario se puso 2 a 0 arriba en los primeros seis minutos. Fabrizio Angileri y Julián Álvarez fueron los autores de los goles en una noche que empezaba con tintes épicos, con claras señales de ser histórica y para recordar. Independiente Santa Fe mostró muchísimas debilidades defensivas. Errores amateurs que que generaron burlas en las redes sociales.Todas las cámaras apuntaron a Enzo Pérez. Y River no sufrió la inexperiencia del mediocampista en el arco. Es que los colombianos no patearon al arco en 45 minutos. Conociendo la debilidad del rival, no inquietaron con ninguna jugada clara. Los jugadores del Millonario hicieron un esfuerzo físico muy importante enfocado en la presión.
River llegó a este partido con lo justo: solo once jugadores firmaron planilla. El brote de coronavirus que empezó el viernes pasado, con el contagio del entrenador de arqueros, se extendió a niveles insospechados. En total, 20 de los 32 anotados en la lista de buena fe de la Copa Libertadores dieron positivo en los días siguientes.
Pérez, lesionado en el partido del domingo ante Boca, hizo un esfuerzo inmenso para representar a su club y no dejar a sus compañeros con un futbolista menos. Fue el más fotografiado, el más mencionado en la televisación, el más destacado en las redes sociales. Enzo, fanático de River, profundizó aún más su vínculo con la institución.
Los jugadores de Santa Fe probablemente recibieron un fuerte reto por parte de su entrenador. Es que todos los fanáticos del fútbol estaban pendientes de este atípico encuentro. La imagen que estaban dejando era muy poco feliz: ¿tu rival tiene a un inexperto en el arco y ni siquiera lograste patear al arco?
Independiente y América de Cali son los peores equipos de la Copa Libertadores. El rival de River esta noche apenas cosechó dos puntos en cinco partidos. En el complemento se vio en la obligación de tratar de cambiar la historia. Con más empuje que ideas llegó al descuento: Kelvin Osorio, a los 73 minutos, convirtió un gol que dejaba un final abierto, interesante.River resistió. Llegó al tramo final del encuentro con lo justo. Se vio una función de compañerismo: el equipo sacó adelante una noche extraña; los defensores, liderados por Jonathan Maidana, lucharon cada pelota con tal de darle paz a Enzo Pérez; Gallardo alentó en todo momento e inspiró confianza. «Que la gente crea porque tiene con qué creer», dijo el DT alguna vez. Y parece que tiene razón.