Rubén Fellay fue uno de los tantos lectores que conoció la historia de Victoria Di Girolamo, joven arquitecta que dejó su Concordia natal, emigró a Malta y consiguió trabajo en solo 15 días, luego de haber atravesado una serie de vicisitudes en la Argentina.
“Me arrepiento de no haberme venido antes”, se sinceraba la entrerriana en un reportaje publicado por Infobae en el cual destacaba su calidad de vida, situación laboral y la seguridad que tenía en Europa.

Su lectura caló hondo en este vecino de la ciudad de Villa Elisa (Departamento Colón), tanto que lo inspiró a compartir una profunda reflexión en su cuenta de Facebook, acompañada por el fragmento de una antigua carta, que en pocas horas se volvió viral:

¿Qué nos pasó?

En la semana leí en El Entre Ríos digital, una nota realizada a una joven arquitecta que se había ido a vivir a Malta, y donde destacaba la calidad de vida que tiene, trabajo, seguridad, entre tantos aspectos que le hacían cerrar el reportaje con una frase contundente: “Es más, me arrepiento de no haberme venido antes”.

La dureza de esa frase disparó en mi mente el recuerdo de una carta de mi tatarabuelo que emigró a la Colonia San José en 1859, y que escribió en 1889 a su familia en Suiza, donde después de detallar las grandes ventajas de vivir en América, realizar dos cosechas al año, no tener la nieve, producir en abundancia, tener animales para hacer los trabajos pesados, dice: “Por todas partes hay ferrocarriles, no es lo que falta en este país de América, cuántas fábricas comienzan a haber, luego será el país más floreciente de todos”.

Y en otra frase decía a su familia: “Yo les puedo decir que no me lamento de estar en América”.

Pasaron un poco más de 130 años y me pregunto por qué no pudimos concretar lo que mi abuelo visualizaba para el futuro del país en el que había buscado nuevos horizontes, sino que nuestros jóvenes emprenden el camino al revés.

Por eso, en este día de lluvia… gris, me pregunto:

¿Qué nos pasó?

…y no tengo la respuesta… sólo la sensación de muchas oportunidades perdidas.Así, este conocido docente elisense -que actualmente se desempeña en dos escuelas locales- invitó a reflexionar, mirando hacia atrás pero también hacia adelante, luego de recurrir a una misiva que su familia atesora desde hace más de 130 años.

Fellay forma parte del Centro Saboya Argentina prácticamente desde sus inicios, una institución que trabaja en pos de estrechar lazos con quienes llaman “primos europeos” y su cultura. Sin embargo, su arraigo a la República Argentina no deja dudas.

Fuente: El Entre Ríos