La vaquillona Aberdeen Angus, de pelaje colorado, estaba muerta debajo de un árbol y presentaba llamativas mutilaciones. Según indicaron fuentes policiales, al animal le faltaba la ubre, genitales, parte de la quijada, lengua y ojos. Además, se podía observar el hueso de la mandíbula, sin rastros de carne y en las zonas de los cortes se encuentra cauterizada la piel, sin sangrado.
Además, el hombre de campo, explicó que el pasto estaba ennegrecido en los lugares donde se notaban las partes extraídas.