Ocurrió en un campo de Rincón de Nogoyá y afectó a 200 novillos. Aseguran que hay más casos en otras zonas de Entre Ríos. El origen de esta gran pérdida está en la mineralización del suelo que produjo la sequía y que absorben las pasturas.
Alrededor de 200 novillos murieron intoxicados y todo indica que en forma indirecta ha sido una consecuencia de la sequía. En un campo de Rincón de Nogoyá, departamento entrerriano de Victoria, un lote de bovinos estaba comiendo en una pastura y en forma abrupta comenzaron a morir.
Los especialistas sostienen que desde hace un tiempo se viene observando la mortandad de vacunos en distintos campos de Entre Ríos.