El presidente de la Nación, Javier Milei, asumió la presidencia pro témpore del Mercosur con una «broma». luego de que su par saliente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, le hiciera entrega del protocolar martillo de las sesiones del bloque, el mandatario argentino remarcó: «Todo lo que sea para romper, me encanta».
Durante su breve discurso, apuntó que «un mercado común regional es un instrumento al servicio del desarrollo económico de sus países integrantes» que «tiene que ser constantemente sometido al escrutinio y no puede tener reglas y determinaciones estáticas, debe ser blando y maleable». El presidente argentino dijo que «tal como funciona hoy, el Mercosur trae más problemas que soluciones».
Asimismo, remarcó que la Argentina ha sido «destrozada por el chamanismo económico» y por eso el país necesita «crecer de manera urgente, comercializar, capitalizarnos, importar y exportar de modo urgente a Paraguay, a Brasil, a Uruguay sí, pero también con el resto de la región y con todo el mundo». En ese sentido, detalló que el Mercosur representa «únicamente el 1,6% del comercio mundial. No podemos darle la espalda al resto del mundo».
Mayor «libre comercio»
Por otra parte, adelantó que durante su presidencia pro tempore del Mercosur revisará el arancel externo común, que calificó como «excesivamente alto», y enfatizó que es «el único bloque comercial que en la última década no bajó aranceles». Por eso, presentará una propuesta para «ajustar el arancel común e estándares internacionales, asegurando una inserción más competitiva, en los mercados globales», precisó.
«Nuestra presidencia explorará un régimen de mayor flexibilidad y autonomía comercial para los integrantes del bloque, para que cada uno pueda instaurar acuerdos comerciales que les resulten convenientes, para que cada país pueda determinar hasta dónde sí y hasta dónde no haciéndose eco de las necesidades de su propia población, entendiendo que el bloque se beneficia del beneficio de sus integrantes», prosiguió en su discurso.
Combate al narcotráfico
Milei consideró que la Triple Frontera «se ha convertido en un colador para las bandas narcoterroristas, que cada día expanden más sus manchas de influencia en la región», por lo que propone la conformación de una agencia «que siga a las bandas en sus acciones criminales, que será ágil, moderna en métodos y recursos y no burocrática y tendrá investigadores de todos los países».
«Espero contar con la buena fe de todos ustedes; la realidad es que tenemos dos caminos: o aceptamos que el Mercosur no funciona y lo disolvemos o lo adaptamos para que sea funcional a las necesidades actuales de sus integrantes», concluyó.