La jueza Sandra Arroyo Salgado dispuso allanar esta tarde el despacho del ex senador Edgardo Kueider, ubicado en el tercer piso del Palacio Legislativo y otras dos oficinas de asesores y personal administrativo en el Anexo del Senado, en Av. Hipólito Yrigoyen 1710. Lo ordenó en el marco de la causa en la que se investiga al ex legislador entrerriano por presunto enriquecimiento ilícito, abuso de autoridad, incumplimiento de los deberes de funcionario público, cohecho pasivo y activo, negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas, tráfico de influencias y lavado de dinero.
Kueider había perdido sus fueros el jueves de la semana pasada tras ser expulsado de la Cámara alta por una amplia mayoría de votos, lo que habilitó el ingreso y registros de sus despachos. Ese mismo 12 de diciembre, por la mañana, la magistrada había pedido el desafuero con fines de detención del ex senador y su secretaria, Iara Guinsel Costa, y le había solicitado a la presidencia de la Cámara Alta, a cargo de Victoria Villarruel, que “extremara las medidas” para garantizar la preservación de posibles pruebas para la investigación.
Ese día, la presidencia desalojó a los empleados que estaban en los despachos, y luego estos fueron cerrados y fajados hasta hoy. Desde entonces, permanecen con custodia de la Policía Federal las 24 horas, según le confirmaron fuentes parlamentarias a Infobae.
El operativo comenzó alrededor de las 18 hs bajo extremo hermetismo, ya que el expediente está bajo secreto de sumario. Al edificio del Senado llegaron efectivos de Gendarmería de civil en vehículos no identificados, con la presencia de personal del Juzgado Federal de San Isidro y de la Fiscalía a cargo de Fernando Domínguez. El objetivo era evitar que trascendiera y hubiera un “show mediático”, según señalaron los investigadores. Fueron recibidos en la planta baja de la Cámara alta, y se hizo presente un asesor de Kueider para habilitar el ingreso al despacho con su huella dactilar al despacho del tercer piso.
En el allanamiento, los efectivos de Gendarmería comenzaron a revisar biblioratos, cajones del escritorio, y a desenchufar computadores para retirarlas. Pasadas las 20.40, el procedimiento continuaba. El objetivo del ingreso y registro de los despachos es llevarse información que pueda ser de interés para la causa, documentación, pendrives, posibles llaves de una caja fuerte o las que se usan en criptominería, como la que tenía en su poder cuando fue detenido al intentar ingresar a Paraguay con USD 211.000 sin declarar. Las inversiones en criptomonedas son una de las modalidades, junto con los desarrollos inmobiliarios, usados por extranjeros que quieren lavar dinero en ese país. De hecho, en Ciudad del Este – a la que buscaban ingresar provenientes de Foz de Iguazú (Brasil) -, proliferan los minadores de monedas digitales por el bajo costo de la energía eléctrica.
El martes, Arroyo Salgado envió Cancillería el exhorto para pedir la extradición de Kueider y su acompañante, Guinsel Costa, con el objetivo de que sean enviados detenidos de regreso al país, y tomarles indagatoria.
La decisión de avanzar hoy con el allanamiento se desencadenó luego de que, esta mañana, el juez en lo contencioso administrativo Enrique Lavié Pico rechazara in limine la acción de amparo presentada por el ex legislador entrerriano para pedir la nulidad de la sesión en que fue expulsado. Ratificó así la validez de esa decisión de la Cámara alta – aprobada por el voto de 60 senadores – al considerar que no puede ser revisada por la Justicia “porque su examen constituye una competencia exclusiva y excluyente atribuida al Senado de la Nación” por el artículo 66 de la Constitución nacional.
En su resolución, Lavié Pico avaló la participación de Villarruel como titular del Senado en la sesión de la semana pasada, objetada por Kueider porque, en ese momento, debía estar al frente del Poder Ejecutivo ya que Javier Milei estaba fuera del país. Sostuvo que su actuación “se limitó a lo expresamente previsto en el art. 57 de la Constitución Nacional”, que establece que “el Vicepresidente de la Nación será presidente del Senado; pero no tendrá voto”, y al artículo 33 del Reglamento del Senado que determina que “el presidente no discute ni opina sobre el asunto que se delibera. Sólo vota en caso de empate”. Para el juez, no quedan dudas que”su participación no ha tenido injerencia alguna en el resultado de la votación al que finalmente arribaron los Senadores Nacionales en uso de sus atribuciones privativas, en tanto se ha limitado estrictamente en el orden parlamentario a presidir la sesión en cuestión”.
Fuente: Infobae