De este total, ocho de estos femicidios –uno de ellos vinculado– sucedieron en Entre Ríos, en un contexto en el que las estadísticas son escalofriantes: en promedio una mujer es asesinada cada 26 horas en la Argentina. Son muertes que estremecen, que dejan ausencias que duelen, cada vez más cruentas. En este marco, según los datos vertido por el colectivo Mumalá, también en este años 174 niños y niñas perdieron a sus madres.
Este año podría establecerse un récord de asesinatos de mujeres, en un contexto en el que se recortó el presupuesto nacional destinado a la prevención de la violencia machista, que destina solo de 11,36 por cada mujer en promedio.
“El femicidio es uno de los hechos más aberrantes de esta violencia, en el marco de crímenes de odio hacia la mujeres. Hay una construcción y una matriz patriarcal que lamentablemente aún está latente, cosificando a la mujer, viéndola como algo que es propiedad del hombre, mercantilizándola incluso en lo que es la trata de personas. No solo hay femicidios, sino delitos aberrantes contra la integridad sexual”, señaló a UNO Silvina Calveyra, presidenta de la Red Alerta.
A su vez, observó: “Los últimos hechos a nivel nacional son aberrantes. A nivel nacional se registran delitos contra la integridad sexual, abuso, torturas. A medida que hay más violencia, hay una perversidad que cada vez avanza más”.
“Esta extrema violencia que estamos atravesando, en el marco también de una violencia estructural y transversal, integra problemáticas sociales que tienen indicadores, y que se agudizan a medida que se agrava la situación de crisis, de pobreza, de desocupación. Prevalecen roles y estereotipos, también asignados por esta matriz cultural, de que el varón es el proveedor de recursos y la mujer realiza las tareas del hogar, y venimos trabajando y deconstruyéndolos”, reflexionó.
Si bien en los dos últimas décadas hubo avances y conquistas en el mundo laboral y social, las mujeres todavía luchan por la equidad de género, en un espacio en el que una concepción patriarcal del mundo está fuertemente arraigada, y los casos de violencia no cesan. La Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación da cuenta de que la violencia psicológica es la que prevalece entre las denuncias. Y la escalada de violencia sigue creciendo, no solo de manera física sino también simbólica, económica, psicológica, cuyas formas muchas veces son naturalizadas. “La mujer ha avanzando en cuestiones vinculadas a la participación política y a partir de los 90 en la participación social, el trabajo fuera de la casa sin dedicarse exclusivamente a las tareas del hogar y al cuidado de los hijos, y el varón cree que ella ha roto ciertos estereotipos sexistas que se han impuestos, y por eso obviamente también es que se viene agravando la violencia”, analizó Calveyra.
“Es un problema social, que ya no pasa por ser varón o ser mujer, y eso hace que tengamos que seguir buscando procesos de trasformación en la búsqueda de equidad. Iguales nunca vamos a ser, por diferencias sexuales, pero sí se puede lograr la equidad entre varones y mujeres, y valorar fundamentalmente que no sigan avanzando todas estas violencias por las cuales estamos atravesados”, refirió, y subrayó: “Por eso también es importante poder trasmitir qué es el feminismo: es un movimiento político y social que busca la equidad entre los varones y las mujeres, y la igualdad en lo que son las oportunidades como sujetas y sujetos de derecho que somos”.
Asimismo, la dirigente reflexionó: “Este proceso de trasformación y esos logros se van a obtener desde la educación en el ámbito de las familias o de referentes familiares. Eso también hace que no eduquemos a las niños y las niñas en esto de la sumisión de tipo sexista de los roles asignados en el juego de las muñecas y los varones en una masculinidad que todo lo tienen permitido”.
Por último, instó a fortalecer las medidas de prevención: “Muchas veces se dictan restricciones perimetrales, que en muchos de los casos no son cumplidas. Esta medida no solamente restringe los espacios físicos por lo que transita la mujer, ya sea el hogar, la calle u otro lugar, sino que tampoco se la puede molestar ni por teléfono, ni en redes sociales. Es mucho más amplio y a veces esto no se cumple. Inmediatamente hay que llamar al 911 y el agresor puede llegar a ser detenido”, dijo, y concluyó: “Creo que habría que ajustar y profundizar algún otro tipo de medida judicial, y fundamentalmente teniendo en cuenta la perspectiva de género, que muchas veces no se considera a la hora de hacer una restricción”.
Actividades en Paraná para crear conciencia y reflexionar
En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia de Género, la Asamblea de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans de Paraná organizó una marcha “contra todas las violencias hacia las mujeres y las disidencias”. La convocatoria es mañana a las 17.30 en la Plaza 1° de Mayo, para movilizarse a la plaza Mansilla.
Por su parte, Silvina Calveyra, de Red Alerta, señaló que habrá una jornada en el complejo Escuela Hogar, organizada en conjunto con la escuela Berduc y Del Bicentenario, quienes llegarán al encuentro con pancartas y banderas alusivas. Habrá una exposición sobre violencia, femicidio, trata de personas y Educación Sexual Integral (ESI) y se prepararán stand fuera del establecimiento para sensibilizar a la sociedad.