A alrededor de las 20 de este jueves, y mientras su madre se encontraba en el cajero, un niño de siete años quien estaba junto a su tía, sufrió una descarga eléctrica al hacer contacto con una farola de alumbrado público, en el espacio verde de calle Urquiza, casi calle 3 de Febrero, en pleno centro de Chajarí.
Asustado y dolorido por el tremendo shock eléctrico, lloraba desconsoladamente, ante lo cual sus familiares fotografiaron el sitio donde ocurrió la descarga, para advertir del peligro.
El niño fue trasladado por su familia al Hospital Santa Rosa, donde quedará en observación hasta este viernes, pero se confirmó que presentaba quemaduras en ambas manos.
Personal de la compañía eléctrica, se apersonó al lugar y luego de confirmar en una de las luminarias públicas, la presencia de tensión, eliminó el peligro existente cortando la provisión de energía eléctrica a toda la línea de farolas y preventivamente, se pusieron fajas de seguridad.