MESA DEL DIÁLOGO POR EL TRABAJO
Presentes:
Estela Miño (Codegu), Domingo Veronesi (Cámara de Comercio Exterior), Marcelo Giachello (Asociación de Hoteleros y Gastronómicos), Rubén Cabrera y Federico Laderach (Centro de Defensa Comercial), Sergio Dalcol (Sociedad Rural), Lorena Arrozogaray y Carlos Silva (Municipalidad de Gualeguaychú), Pablo Cammarota (Cámara de la Industria), Ariel Crettaz (Obispado), Matías Stockli (Colegio de Veterinarios), Evaristo Bértora (Colegio de Graduados en Ciencias Económicas) y Claudio de los Santos (CGT Regional Gualeguaychú).
En el marco de la mesa de Diálogo por el Trabajo, impulsada desde Codegu – Agencia de Desarrollo Gualeguaychú a través de entidades miembro e invitando a sumarse a la Municipalidad y al Obispado de Gualeguaychú, los arriba mencionados realizaron el segundo encuentro dando así continuidad al intercambio y reflexiones sobre un tema transversal como es el Trabajo. A continuación, se expone el primer Documento surgido de dicho debate:
COMUNICADO N° 1
“PENSAR LO URGENTE SIN DESATENDER EL FUTURO”
Entendemos que existe la necesidad de un debate serio y profundo que permita pensar en el Trabajo incluyendo tanto al empleo como a su generación, y también en la preservación como en la creación de nuevas modalidades.
Esta Mesa nació en una situación compleja y debe continuar porque la problemática va más allá: primero, tratando de ver cómo se podría sostener hoy, pero ir desarrollando –a mediano y largo plazo- propuestas para la generación de un trabajo de calidad, sin precarización y con inclusión.
Sostenemos que la generación de fuentes laborales, la identificación y solución de las problemáticas de nuestras cadenas productivas y la planificación de una ciudad con mayor desarrollo en un futuro cercano, pueden lograrse más eficientemente a través del diálogo y trabajos interinstitucionales como el que se viene realizando desde esta Mesa.
No queremos dejar de recordar tampoco el rol que el trabajo debe representar para el hombre. Su trabajo debe ayudar a humanizar sus relaciones tanto personales como con la sociedad que lo rodea, debe permitirle desarrollarse y expresarse a los demás.
La pandemia ha expuesto una nueva realidad y eso amerita idear alternativas creativas y positivas para enfrentar el nuevo escenario. También debemos estar atentos a los cambios de paradigma que se vienen produciendo influenciados por los tipos de industria 4.0 (transformación digital), internet, inteligencia artificial, entre otros, que ya están entre nosotros y todo hace presuponer que se profundizarán.
Uno de los desafíos radica en abocarnos en primera instancia a lo urgente, pero sin desatender la mirada en el mediano y largo plazo; haciendo foco en reactivar el comercio y el trabajo genuino.
Resulta imprescindible pensar un Plan de Capacitación que sea consensuado entre todos los actores, para de esa manera ahorrar esfuerzos, utilizar mejor los recursos y no superponer las temáticas.
Asimismo, impulsar en el ámbito empresarial la compra local, a través de otras empresas o comercios de la ciudad, emprendedores o el mismo Municipio. Esto permitirá sustentar el comercio gualeguaychuense, lograr que el dinero quede en la localidad, generar un círculo virtuoso, acciones que redundarán en ayuda directa o indirecta a muchas familias.
Apostamos por visibilizar los sectores que tienen la posibilidad de generar empleo genuino para desarrollar herramientas que permita acompañarlos. En ese sentido, debemos detectar y hasta impulsar los procesos de reconversión comercial que puedan no sólo generar empleo sino hacer que la actividad sea autosustentable. Para ello, resulta esencial proponer mecanismos novedosos y eficientes y gestionar una capacitación rápida de estos nuevos formatos.
Necesitamos que los ámbitos imprescindibles para sostener las actividades sigan siendo los lugares más seguros a la hora de enfrentar los contagios, para evitar cierres de actividades necesarias para la subsistencia de los sectores más sensibles de la economía. Convocamos a la sociedad toda a tener la mayor precaución en el desarrollo de las actividades sociales, factor primario en la escalada de contagios. El comerciante, el industrial y el emprendedor ha puesto en marcha protocolos -muchas veces muy costosos- para mantener la actividad y ese esfuerzo debe ser valorado.
En el comercio y las empresas existe predisposición para adherir a protocolos de bioseguridad. La realidad en lo sanitario y lo económico es muy compleja. Es necesario que debemos caminar en un mismo rumbo y mantener un diálogo permanente con el COES local para aportar en la seguridad de los trabajadores y la actividad laboral.
También resultará positivo que la comunicación sea clara a la hora de informar las disposiciones y hacer cumplir las normativas para brindar así certeza y credibilidad.
Estos primeros preceptos, variados, transversales y ambiciosos, son simplemente un punto de partida para un diálogo franco, necesario y maduro para acercarnos a la problemática del trabajo y encontrar mecanismos, puentes y respuestas a esa complejidad.