La semana pasada, el gobierno nacional anunció la reducción de las tasas del interés para las compras a través del programa Ahora 12. Así, cayó a la mitad la tasa de interés y el costo financiero total, respecto a los índices que hacían casi imposible y desventajosa cualquier opción de compra financiada.
Con la medida oficial, los planes Ahora 3, 6, 12 y 18 tienen una tasa de interés del orden del 25% anual, muy por debajo de la inflación calculada en más del 40%.
Con Ahora 3, la Tasa Nominal Anual (TNA) es de 15,33% y el Costo Financiero Total (CFT) 20,30%. El Ahora 6 tiene un TNA 17,19% CFT 23,11%; con Ahora 12, una TNA de 18,37% y un CFT de 25,06%. Y con el Ahora 18, la TNA es de 18,78% y el CFT, 25,89%.
Si bien la situación económica sigue siendo complicada, este incentivo comercial actuará sin duda como un dinamizador de las ventas, aunque por la crisis es una incógnita qué alcance tendrá.
Pero no es el único atractivo para captar clientes en una fecha clave para revertir más 18 meses de caída consecutiva de ventas. Bancos ofrecen descuentos de hasta 25% en determinados días; a su vez, los comercios exhiben promociones propias, que van desde descuentos por pagos en efectivo, hasta planes de financiación propios: las cadenas de electrodomésticos publicitan planes hasta 24 y 36 cuotas, con intereses algo más bajos que hace un año atrás, con tasas de financiación que van desde el 56% y hasta casi el 80% anual; en 2018, el costo anual era superior al 100%.
La semana en el principal paseo comercial de la capital provincial arrancó muy tranquila, demasiado para los comercios.
En un local de venta de indumentaria, uno de los rubros más demandados para esta fecha, confiaron que fue un lunes atípico, por el acto electoral del domingo. Es que fue menor el movimiento en las calles no solo por la falta de clases en las escuelas donde se votó, sino también porque muchos de los participantes en las mesas se tomaron un descanso. Una camisa de costo medio puede conseguirse entre 1.000 y 1.200 pesos, un pantalón de jeans, un poco más; la opción más económica siempre es una remera: según la calidad, hay desde 600 pesos en adelante. Para las camisetas de clubes, si son las oficiales hay que pensar en más de 1.200 pesos.
En las casas de electrodomésticos, los pocos vendedores que fueron quedando como consecuencia de achiques empresariales por falta de ventas, mostraron su mesurado optimismo, y también la incertidumbre por el nivel de operaciones que se pueden concretar en esta fecha. “Creemos que a partir del miércoles, pero fundamentalmente jueves, viernes y sábado serán los días con más actividad”, opinó uno de los consultados, al hacer referencia a que justamente el Plan Ahora 12 rige solo en esos días. Aunque claro está, en el rubro volvió el crédito de la casa, en condiciones un poco más favorables. El regalo más optado para los papás suelen ser los aparatos de telefonía celular: parten desde los 8.000 pesos en adelante.
“Esperemos que el mal tiempo no afecte el movimiento de la gente”, se esperanzó una vendedora de un local de ropa deportiva. Allí, las zapatillas de marcas se ofrecen desde 1.600 o 2.200 pesos en adelante. En otros locales outlet, se pueden conseguir algo más baratos.
El modo de festejar el Día del Padre también adquirió otras singularidades. Por ejemplo crecieron opciones de recreación o esparcimiento: las promociones de salidas a bares o restaurantes, en familias, han ido ganando terreno sobre los regalos tradicionales. En lugares selectos de Paraná, una parrillada puede costar hasta 800 pesos cada uno.
Cálculos
El año pasado, el ticket promedio de las ventas fue de 680 pesos. El sector comercial espera un repunte que al menos iguale el proceso inflacionario de un año.
En ese caso, para esta fecha debería rondar los 950 pesos, un costo sensible si se tiene en cuenta la pérdida adquisitiva de los salarios, y una inflación que marcha a un ritmo superior al de los ingresos fijos.
Las últimas dos fechas del Día del Padre, de los años 2017 y 2018, estuvieron debajo de las expectativas, con ventas en baja: el año pasado, la Cámara de Actividades Mercantiles Empresarias (CAME) relevó un descenso del 6,4% en las ventas minoristas, frente a la misma fecha del año anterior, cuando también ya se habían retraído las operaciones comerciales, un 3,6%.