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ENTRE RIOS – RUTAS TRAGICAS 8 MUERTOS EN EL FIN DE SEMANA LARGO

febrero 14, 2018

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«La situación de la infraestructura vial, sumada a las altas velocidades y el no respetar las normativas vigentes, hacen que las consecuencias que trae un impacto frontal sean considerablemente altas, como tuvimos que padecer este fin de semana, particularmente», sostuvo.»En el Puente Victoria-Rosario, donde murieron cuatro personas, hay una saturación de vehículos, y esto quiere decir que la velocidad de circulación es reducida, lo cual hace que un conductor imprudente tome estas decisiones de realizar un adelantamiento en un lugar prohibido o en un lugar, donde pese a no estar prohibido, no sea prudente en un momento determinado», explicó Galliussi. «La saturación se ve marcada por el tránsito pesado, por el Puerto de Rosario», indicó.»Estas acciones de los conductores generan situaciones conflictivas que a veces se pueden evitar desviando a la banquina.
Pero sobre los puentes o en sus accesos no se puede desviar, porque no hay banquina», señaló. En ese sentido, «el primer consejo es que los conductores respeten las normas de tránsito y, si no pueden adelantarse, por ejemplo, que no se adelanten».Al mismo tiempo, indicó que «hay límites de velocidad en todos lados, que lamentablemente son infringidos». La velocidad máxima permitida en todas las rutas de la provincia es de 110 km/h, a excepción de la Autovía 14, donde es de 120 km/h».»Se ve que de manera tan natural muchos superan ese límite, lo que muestra que hay un mal que se ha generalizado, que es el exceso de velocidad.
En el Puente Victoria-Rosario hay sectores de 40 máxima y otros de 80 máxima, pero si uno está detrás de un camión que va a 70 y no se puede adelantar, por más que haya un cartel de 110 máxima, no va a poder ir a esa velocidad», manifestó Galliussi.»Sería excelente que en todos lados haya cuatro carriles, con autovías o autopistas, pero hoy por hoy no están, entonces debe mediar la prudencia de los conductores con el simple hecho de respetar las normas de tránsito»»Mi trabajo es con la muerte», expresó Galliussi, en referencia a su puesto al frente de Accidentología Vial. «Porque me toca ir a los siniestros de personas fallecidas y veo cómo quedan las familias, con mucha tristeza, mucho dolor.
Es un flagelo que destruye muchas familias. Desde hace mucho tiempo deberíamos haber empezado a tener en cuenta esto. Qué lindo sería no tener trabajo en esta área», sostuvo.»Hay que entender que nos puede pasar a cualquiera. Cargos, títulos y quien sea. Nadie está exento. Eso es lo más duro y lo más real, además de la destrucción de muchas familias», concluyó.
(9AHORA)

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