La joven falleció este domingo, confirmó Elonce. Estaba bajo tratamiento oncológico desde hace más de un año. Su familia agradece la colaboración de todos los que ayudaron con rifas y eventos para juntar dinero para conseguir medicamento.
Falleció Pamela Benítez, la joven de 30 años oriunda de Paraná que estaba realizando un tratamiento oncológico para mejorar su calidad de vida. Debía disponer de 1.200.000 pesos, cada 21 días, para adquirir la droga y así llevarlo a cabo.
En principio, tras una campaña de solidaridad, rifas y donaciones, pudo conseguir las dos primeras dosis para comenzar a tratarse. Luego luchó en la Justicia y resultó favorable uno de los amparos judiciales que presentó exigiendo a su prepaga que le cubra el costoso tratamiento.
En una oportunidad, Zulma, su mamá, había contado a Elonce que el tratamiento “requería una droga (Pembrolizumab) que actúa sobre las defensas y de esta manera se ataca a las células malas. Ella ya hizo radioterapia, quimioterapia, braquiterapia, tuvo un tratamiento intensivo y tras una resonancia, se pudo comprobar la existencia de células atípicas: El tratamiento biológico e inmunológico ideal para esto, es esa droga”.
Tras varios meses, este domingo por la mañana se confirmó su fallecimiento. En el último tiempo la joven había estado internada. Su familia agradece a todos la colaboración brindada a través de rifas, eventos y actividades solidarias que se realizaron para juntar dinero para comprar el medicamento que necesitaba.
Desde el Aero Club Paraná compartieron unas palabras de despedida: «Nadie está preparado para despedir a un hijo/a. Es anti natural, e ilógico, pero también es cierto que es la vida, el destino o como se llame. Desde este lugar, nuestro Aeroclub, que lo ha visto crecer a Gerardo en la pasión del vuelo, queremos expresarle a él y a su familia nuestro pesar y acompañamiento en este momento. No tenemos dudas, que la jovial alma de Pamela, estará en el lugar reservado para quienes se aferraron a la vida hasta sus últimas fuerzas, como forma de transitar su paso terrenal. Ahora, con el dolor que conlleva la desaparición física, Pamela, descansa en paz.»